16 Ene Decepción en el Real Madrid
Cuando hace un par de día escuchaba, en diferentes emisoras, diarios, restaurantes, de las corruptelas que se estaban descubriendo sobre Ramón Calderón, Presidente del Real Madrid, no me podía creer, que volviésemos a los tiempos, tampoco hace tanto, de los problemas con los votos por correo.
Pero esta vez todo ha llegado hasta niveles de corrupción, sólo vistos, en la política de paises con repúblicas bananeras y dictatoriales, como… Da igual. Ir a una Asamblea de Compromisarios, órgano que en el actual Real Madrid, que no es una sociedad anónima deportiva, es necesario para aprobar las cuentas de la Junta Directiva y del Presidente, y encontrarse con que alguien «cuela» a sus amigotes para que voten a favor de la aprobación de las cuentas del ejercicio anterior, sinceramente me parece vergonzoso.
Soy hincha del Real Madrid desde que era bien pequeño. Parte de mi familia materna son del Atlético de Madrid, y alguno de la familia paterna es del Barça. Siempre nos hemos metido unos con otros por los temas deportivos, vamos una rivalidad sana, y jamás, pues es un deporte, ha llegado la sangre al río.
Hoy siento vergüenza, de verdad, de ser hincha de este club. He vivido muchas Ligas en el Bernabeu, he asistido a dos finales de la Champions, a las finales de la UEFA, a un largo etcetera de partidos, y me siento hincha como el que más.
El Real Madrid fue considerado, y aun lo es, como el mejor club de futbol del siglo XX, distinción que nos concedió la UEFA y la FIFA. El Real Madrid ha ganado las dos últimas ligas, varias supercopas, trofeos veraniegos, y ha paseado el nombre de la ciudad de Madrid con orgullo y prestigio por todo el mundo.
Este Presidente y su Junta directiva me han decepcionado, y lo que han hecho no tiene nombre, ni es justo, ni esta afición, que se encuentra por todo el mundo se merece pasar por esto. Que tengamos nuestros más y nuestros menos, con los hinchas del Barça, porque este año están jugando de fabula, y nosotros no, es hasta cierto punto normal. Pero, que, a partir de mañana, nos sonrojen con la decepcionante actuación de Ramón Calderón, creo que no nos la merecemos.
Ah, y la solución no pasa por poner un regente, o que la Junta acabe el mandato, aun queda año y medio. No, por ahí no van los tiros. La dimisión debe ser fulminante, y no vale con dimitir, pues si hay indicio de delito o falta, que los responsables paguen sus culpas.
Me repito, esto sólo ocurre en paises, donde sus dictadores campan por su anchas, y hacen, que para eso son dictadores, lo que les viene en gana, tipo Cuba o Venezuela.
No Comments